8.2.06

¿Quién piratea a quién?

Hace unos días me autocensuré, es cierto. Retiré algunos artículos de este blog, incluidos tres que se referían a la SGAE. Quería dejar de hacer leña con asuntos como este, porque cuando se habla o escribe de la SGAE casi siempre es para pedir que devuelvan el dinero y dejen de apropiarse indebidamente de él en distintos casos.
Me siento obligado a volver a publicar y ampliar uno de esos artículos ante la clausura de la web de Frikipedia por publicar que SGAE es el acrónimo de Siempre Ganamos Algún Euro, entre otras cosas.
[...] También estaría bien que algunos seres humanos que opinan acerca de la llamada piratería en Internet dejasen constancia, indicasen explícitamente que son juez y parte por tratarse de asalariados de su principal defendido, la SGAE. Y si no lo hacen ellos, que los llamados periodistas que los acompañan en estudios o platós en esas entretenidísimas tertulias o esos no menos interesantes debates se encarguen.
Demasiada información contradictoria. Sabemos que el desconocimiento de una ley no exime de su cumplimiento. Por eso quiero que me digan donde puedo leer esa ley que prohíbe que yo comparta un archivo sonoro con mi amigo en Nueva Zelanda (al menos en España, utilizar conexiones P2P para compartir archivos solo se considera delito cuando existe ánimo de lucro). Y de los llamados periodistas, qué voy a decir, cuando se meten en estos berenjenales. Con el permiso de Frank Zappa, “el periodismo musical consiste en gente que no sabe escribir entrevistando a gente que no sabe hablar para gente que no sabe leer”.
Por último, como creador visual me pregunto. ¿Cuándo me van a devolver mi dinero?, dinero que del que se incautan en forma de canon cada vez que voy a comprar un CDR/DVDR para entregar alguno de mis trabajos a alguno de mis clientes o simplemente para realizar mis propias copias de seguridad y archivo. Desde el momento en que levanto el lápiz del papel, ese mono que he hecho es de mi propiedad (intelectual) y la autoría es solo mía.
No estoy obligado a pagar un solo euro a la SGAE por llevar a cabo una obra creativa, por plasmar en papel u otro soporte una idea original, realizar un diseño o una fotografía. Si quiero distribuir mi obra y tengo medios para ello, no tengo por qué dar un solo euro a la SGAE. Si quiero archivar mi obra y tengo medios para ello, no tengo por qué dar un solo euro a la SGAE. Pero qué más da si estoy o no obligado a qué. Aquí paga todo el mundo.
Los socios de Asimelec, AIE, AISGE, EGEDA, SGAE, DAMA y CEDRO: ¿por qué no dicen algo a sus jefes? ¿por qué no se borran automáticamente de estas asociaciones?. Estamos tontos ¿o qué?.
He de decir que para mi un asociado de la SGAE tiene el mismo interés que uno de la tuna, pero intento ser buena persona, es el principio del fin jóvenes.
Bruselas expedienta a la SGAE y a sus socios europeos
AGENCIAS
7 de febrero de 2006
La Comisión Europea abrirá un expediente a La Sociedad General de Editores (SGAE) por prácticas restrictivas en la venta de licencias para descargar música de Internet y para otros nuevos formatos, como las retransmisiones por cable o por satélite. Este expediente no será exclusivo de la SGAE, ya que la decisión de la Comisión Europea afecta a la Confederación Internacional de Sociedades de Autores y Compositores (CISAC), a la que pertenece la SGAE, entre otras.
Las sociedades afectadas tienen ahora dos meses para defenderse por escrito del dictamen enviado por la Comisión. Tras este proceso, podrán pedir una audiencia oral para exponer sus argumentos. Después de escucharlos, el Ejecutivo comunitario, tomará una decisión definitiva, que podría concretarse en multas por abuso de posición dominante. Según Bruselas, algunos aspectos de los contratos de cesión de música para Internet, cable o satélite, infringen la prohibición de prácticas restrictivas recogida en el Tratado de la UE. Especialmente, la obligación para los autores, de transferir sus derechos solo a su sociedad nacional, sea cual sea la explotación que se haga a continuación. Las restricciones territoriales que pretende atacar la Comisión Europea, son aquellas que obligan a los usuarios a obtener una licencia solo de la empresa de gestión de derechos de su misma nacionalidad, además de limitarse, exclusivamente, al territorio doméstico. Bruselas afirma, que estos acuerdos, crean, un ‘efecto red’ que consolida el monopolio de las sociedades de autores en sus territorios nacionales. Este hecho, impide la entrada en el mercado de otras empresas de gestión de derechos de autor. Para evitar este tipo de prácticas, el Ejecutivo comunitario, ha recomendado a la industria musical, que cree una licencia única europea para la descarga de música en Internet. El objetivo sería luchar contra la piratería y evitar la fragmentación en mercados nacionales. Si se lograse esta meta, se recuperaría el terreno perdido respecto a Estados Unidos en este área de negocios. Según un estudio publicado por Bruselas, los mercados musicales vía Internet generaron 207 millones de euros en 2004 en Estados Unidos, frente a los 27.2 millones en la UE. Todo esto, a pesar de que el mercado europeo asciende a 450 millones de consumidores, frente a los 280 millones del estadounidense.